Hablamos de actitud escoliótica cuando la columna vertebral presenta una curvatura sin deformidad ósea; se trata de una postura y se puede corregir fácilmente con cambios de posición. Suele producirse por una diferencia de longitud entre ambos miembros inferiores, aunque pueden existir otros factores como posiciones anómalas para intentar evitar o disminuir un dolor vertebral. Al contrario que con la escoliosis propiamente dicha,la actitud escoliótica sí permite la corrección mediante el método Pilates, ya que se trata de una deformidad no estructurada que tiene cierto grado de flexibilidad.
La rutina para reequilibrar el cuerpo debe constar de ejercicios en cuadrupedia, de báscula pélvica (ej: pelvis curl), abdominales, hiperextensión de columna (ej: upper back, ), y por último ejercicios de elongación de columna (ej: swimming 2).